Rebelión en la granja.
Resumen:
Este libro cuenta la historia de una granja en la que en un principio los animales que la habitaban, estaban descontentos con el trato que recibían de su amo humano, y siguiendo las instrucciones del animal mas sabio y respetado, un cerdo al que llamaban el Viejo Mayor decidieron rebelarse contra su dueño y contra cualquier ser humano, rechazando así cualquier conducta que fuera relacionada a la raza humana y estableciendo unos valores de igualdad y camaradería entre los animales.
Siguiendo las instrucciones del Viejo Mayor los animales deciden rebelarse y consiguen expulsar de la granja a su dueño, a la familia de este y a sus trabajadores. En ese momento los animales se sienten felices y libres por primera vez en su vida, dos cerdos deciden tomar el mando(los cerdos son los animales más listos de la granja seguidos por los perros): Napoleón y Snowball que habían aprendido a leer y escribir, hay toda una celebración en la cantan el himno que les enseñó el Viejo Mayor y en la que escriben los siete mandamientos del animalismo en una pared de la granja, además deciden celebrar todos los domingos ese día. Los animales se pusieron manos a la obra para trabajar y sacar adelante su granja (le cambiaron el nombre por Granja Animal y establecieron que su bandera seria verde con una pezuña dibujada). Los “lideres” mandaron a las palomas a que difundieran su mensaje para que la revolución se extendiera a las demás granjas, intentaron enseñar a los demás animales a leer y escribir, coordinaron el trabajo y las cosechas y expusieron sus nuevas ideas para mejorar, en las que no se ponían de acuerdo.
El dueño de la granja se dispuso a retomar el control sobre su terreno y con unos cuantos granjeros más que desaprobaban el gobierno de los animales y que no querían que cundiera el ejemplo en las demás granjas decidieron ayudar a Jones y atacar a los animales, que gracias a una estrategia de Snowball y al coraje de Bóxer(un caballo y el animal más fuerte de la granja) rechazaron el ataque y echaron a los humanos de sus tierras, después de esto hubo otra celebración y decidieron celebrar ese día una vez al año.
Un día Snowball que hubo terminado los planos de un molino para que la granja tuviera electricidad y los animales pudieran estar más cómodos, se dispuso a enseñar sus planos y a ofrecer su visión del asunto, cuando Napoleón vio que Snowball iba a ganar, ya que los animales lo estaban apoyando más decidió mostrar su arma secreta; 9 perros feroces que había estado “educando” clandestinamente, estos 9 perros se lanzaron contra Snowball por orden de Napoleón y lo echaron de la granja.
Después de que Snowball se fuera todo fue de mal en peor, Napoleón empezó a comportarse como un autentico dictador, y el resto de los animales parecen no darse cuenta de ello porque cada vez que Napoleón hace algo injusto manda a su mejor orador para convencer a los animales de que es por su bien. Empezó a tratar con humanos, quiso que lo llamaran líder, achacaba cualquier cosa mala que pasaba a Snowball(al que acusó de traidor y de estar de parte de Jones desde un principio), explotaba a los animales haciéndoles trabajar en la construcción de el molino(se atribuyo esa idea como suya propia), les racionaba la comida mientras que él, los demás cerdos y los perros tenían comida de sobra, realizó matanzas cuando algunos animales declararon estar en complot con Snowball, quitó el himno que les había enseñado el Viejo Mayor, convirtió a los cerdos en la clase privilegiada, modificó los siete mandamientos por su cuenta engañando a los demás animales para que no pudieran reprocharle nada, adoptó conductas humanas(se mudó a la casa de la granja, dormía en camas, bebía alcohol, se vestían con ropa del antiguo dueño e incluso los cerdos empezaron a andar a dos patas), se alió con los de la granja de al lado que fueron los que intentaron hacerse con el mando de la granja, en definitiva se convirtió en lo que quisieron evitar desde un principio, incluso en algo peor, pero como nadie se acordaba después de varios años de lo sucedido durante la rebelión ni de los tiempos en los que estaba el dueño de la granja porque los animales antiguos habían ido muriendo y los que quedaban apenas recordaban nada.
Los animales se dan cuenta de lo que ha pasado cuando al asomarse a la ventana de la casa por una fiesta entre los cerdos y los de la granja de al lado surge una gran pelea y no pueden distinguir quienes son los cerdos y quienes los humanos.
Opinión personal:
En mi opinión este libro de George Orwell es un fiel reflejo de cómo se han establecido en nuestra sociedad la política, las jerarquías sociales etc. durante siglos.
Y pienso que el haber ambientado la historia en una granja y el hecho de que sus protagonistas sean animales favorece a una mayor comprensión de lo que el autor nos quiere transmitir, yo he pensado que los animales son bastante estúpidos al dejarse manipular de esa manera por su líder, pero conforme iba leyendo el libro me iba dando cuenta de que es exactamente lo que cuentan los libros de historia que estamos estudiando, los cerdos son la clase alta y los privilegiados, los perros formarían el ejército y la guardia y el resto de los animales a los campesinos ignorantes que han apoyado a sus lideres fielmente. Me recuerda sobre todo a la revolución francesa, en la que la gente apoya la revolución para librarse del autoritarismo de la monarquía y cuando acaba se encuentran instaurado el régimen de terror.
Me ha resultado un libro bastante entretenido, que te da un mensaje para que después de leerlo reflexiones sobre ello y por supuesto que lo recomendaría.
Miriam Segovia Jiménez
2º Bachillerato B
11 de diciembre de 2008
Rebelión en la granja
Etiquetas: Yo leo... ¿y tú capricornio?
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1 comentarios:
Este libro, Rebelión en la graja, fue una gran revelación para mi, aunque debo confesar de que no lo leo desde eses tiempos lejanos de universidad, en los primeros semestre de Periodismo. Esa forma de Orwell de interpretar lo que fue la Unión Soviética, no solo es una forma ingeniosa de parodia, sino también una bella demostración de que la realidad puede ser interpretada con las armas que nos presta la literatura. Mi personaje preferido siempre fue el burro, que poco interfería en la historia, pero que hacía el papel de la zona intelectual, el que, a pesar de que se acordaba de todas las malas decisiones y todas las mentiras de los otros animales, prefería no intervenir en los asuntos de los gobernantes, estos lameculos que, como ocurre en todos los países donde impera el miedo, como el mío, Colombia, son siempre cerdos.
un abrazzzzo
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